Aún falta para que esta actualización llegue al mercado pero el cambio ya ha sido confirmado. También tendremos la posibilidad de iniciar desde el escritorio evitando la pantalla de inicio.

El botón de inicio a vuelto (o volverá) y todo el universo Windows respira aliviado. 
 
El botón de inicio a vuelto (o volverá) y todo el universo Windows respira aliviado.
Como un amigo que nunca debió irse, vuelve el botón de inicio. Los ejecutivos de Microsoft ya habían dado pistas sobre este cambio a aplicarse en la versión 8.1 de Windows, pero nueva información e imágenes han aparecido para confirmar este hecho. Por supuesto, existen otras modificaciones y características que llegarán con la actualización del último sistema operativo de la compañía de Bill Gates, pero la preocupación del usuario promedio siempre ha estado en un solo punto de la pantalla.
El primer dato firme llegó a través de una imagen filtrada que mostraba al nuevo sistema operativo con el botón de inicio en su posición tradicional. Incluso tenemos unos pequeños detalles estéticos adicionales, dado que al parecer al pasar el puntero del mouse sobre el botón de inicio este cambia de color.  El botón de inicio estará habilitado por defecto (en realidad no podrá deshabilitarse), pero no será visible siempre en las aplicaciones con estilo Windows 8.
Sin embargo seguirá allí, y aparecerá apenas llevemos el puntero sobre su posición. Otra opción importante es que la versión 8.1 le permitirá a los usuarios iniciar directamente desde el modo escritorio, aunque la alternativa no aparece habilitada por defecto. Esta opción ha sido marcada como de singular importancia para el uso en empresas. De este modo los usuarios podrían evitar el tener que pasar por la pantalla de Inicio.
Por otro lado también se producirán cambios en la navegación, poniendo a disposición de los usuarios más opciones de configuración que aparecerán en las propiedades de la barra de tareas. Un mayor grado de configuración de la interfaz de usuario seguramente hará más cómodo el uso del sistema. Las aplicaciones, por ejemplo, podrán ordenarse utilizando diferentes tipos de vistas, incluyendo un diseño bastante tradicional. Muchos de los cambios que había propuesto Microsoft han sido muy bien recibidos en dispositivos móviles, pero no han tenido el mismo éxito en las instalaciones de escritorio.