Los médicos no pueden estar en dos sitios de un hospital al mismo tiempo, y en el caso de grandes centros médicos, pueden perder mucho tiempo yendo de un lado para otro. Si además, se requiere su presencia en otro hospital, entonces los desplazamientos merman seriamente el tiempo que el médico puede dedicar a la labor más importante de su oficio: Ejercer la medicina. Además, en casos de extrema urgencia, en los que se necesite el asesoramiento inmediato de expertos para tomar una decisión, no hay tiempo para desplazarse.



El robot RP-VITA recorre con rapidez el pasillo de una unidad de cuidados intensivos. (Foto: Reed Hutchinson / UCLA)


Contar con un robot que se desplace de habitación a habitación y les ofrezca en tiempo real imágenes y toda la información médica necesaria, les ayudaría a lograr hasta cierto punto esa capacidad de poder estar en dos sitios a la vez, pudiendo así dedicar más tiempo a un paciente en estado crítico pero sin desatender su labor de vigilancia de otros pacientes.

El Centro Médico Ronald Reagan de la UCLA (Universidad de California en Los Ángeles), el primer hospital del mundo en introducir un robot de presencia remota en su unidad de cuidados intensivos neurológicos, en 2005, ahora da la bienvenida al RP-VITA, el primer robot de esa clase capaz de recorrer el hospital por su cuenta.

RP-VITA, apodado EVA, es un robot de unos 165 centímetros de altura y 80 kilogramos de peso. A diferencia de modelos anteriores que eran guiados por los médicos mediante un joystick a través de un ordenador, esta nueva versión se autoconduce mediante un piloto automático, permitiendo que los médicos dediquen más tiempo al cuidado de los pacientes.

Con la simple pulsación de un botón en un iPad, el Dr. Paul Vespa, director de atención neurológica crítica en el citado centro médico, y profesor de neurocirugía y neurología en la Escuela David Geffen de Medicina, adscrita a la UCLA, puede hacer que el robot vaya hasta la habitación de un paciente. Equipado con 30 sensores que le permiten "ver" cuándo una camilla o un espectador curioso bloquea la ruta, RP-VITA posee la inteligencia suficiente para comprender la situación y modificar su trayectoria a fin de esquivar el obstáculo y poder seguir avanzando hacia su punto de destino.

Después de que el robot llega al lado de la cama en la que yace un paciente, Vespa puede examinar a esa persona en tiempo real. Un monitor de video de doble vía en el "rostro" de RP-VITA permite al paciente y al médico verse y escucharse mutuamente. Una capacidad de zoom muy buena permite a Vespa hacer a distancia cosas como mirar de cerca los ojos del paciente para comprobar si sus pupilas están dilatadas.

Desarrollado conjuntamente por las empresas InTouch Health e iRobot Corp. (esta última conocida por sus populares robots domésticos que barren, aspiran y friegan suelos), el software de RP-VITA crea un mapa de la planta del hospital donde trabaje que está integrado con las fichas de los pacientes ingresados. De este modo, el robot sabe a qué habitación ir cuando un médico selecciona un paciente en un iPad. El mapa, guardado en la memoria interna de RP-VITA, se actualiza constantemente conforme los pacientes son ingresados o dados de alta.

El robot también permite que los especialistas de un hospital evalúen casos complejos de hospitales en otras partes del mundo. Los datos e imágenes médicas del paciente, los cuales están codificados, son descargados con facilidad de una red.